Creencias Acerca de un Buen Descanso

Reflexiones con Mañanas Milagrosas – Parte Final

Y para concluir en este bello libro, nos invitan a despertarnos como minimo una hora antes de lo que solemos levantamos, nos proponen ciertos ejercicios, para activarnos y comenzar el día de una forma más provechosa, así que la sugerencia es antes de las ocho, y para unos pocos, esta hora no conllevará ningún problema, pero, para otros muchos, sí que lo hay, porque por alguna razón ellos han experimentado que si duermen menos, el nivel de activación al otro día, no será el mismo.

Hay muchas creencias acerca de cuantas horas deberíamos dormir para tener un óptimo descanso, hay unos que dicen que todo depende de nuestra edad, genes, actividad física, etc. y esto hace parte del conjunto, pero lo que me llevo a recalcar esta parte, es que aquí, nos mencionan algo muy valioso, el autor dice, que el tiempo que durmamos, no nos garantizan un excelente reposo, sino, que tiene mucho que ver con cómo nos vamos a dormir, de qué manera y bajo que decretos lo hacemos, pues cada uno de nosotros, tenemos determinadas horas de sueño decretadas para un buen descanso, pero lo que es cierto es que esto no nos garantiza ni dormir bien, ni amanecer con energía.

Así que dormir poco o mucho no es el dilema, muchas veces, el estar en la cama durante equis horas viene encadenado de una serie de acuerdos y creencias colectivas que nos aseguran que, el descansar este tiempo en concreto nos dará un beneficio y por el otro lado, están las personas que se auto-exigen y no se permiten más de cinco o seis horas, porque para ellos hace parte de su regla del éxito.

Se  ha instalado en nuestra sociedad, que para amanecer descansado y ser productivo, es necesario dormir equis horas, no pongo cifras porque cada uno tiene un acuerdo diferente, así que dentro nuestro propio programa determinamos que para estar activo y despertar con energía y con fuerza, necesito un margen de tiempo. Ahora me atrevo a hacerte una pregunta ¿y si cambiamos estas creencias?

Lo cierto es que no depende de la cantidad de tiempo que durmamos, si no, de cómo nos vamos a dormir. La conexión entre el cuerpo y la mente es algo poderoso y desde mi punto de vista, tenemos que responsabilizarnos de cada aspecto de nuestras vidas, incluido el poder despertarnos diariamente, sintiéndonos energéticos, sin tener en cuenta cuántas horas hayamos dormido.

Esta vez podemos cambia la relación que tenemos con el sueño, con el simple hecho de decretarnos una afirmación de buenas noches, en la que te digas a ti mismo que por la mañana te despertarás energético y productivo, así que cuando pongas el despertador, repite si es posible en voz alta, Gracias por darme estas “5 horas de sueño esta noche”, “cinco horas” es exactamente lo que necesito para sentirme, descansado, motivado, inspirado y activo al despertarme.

Nuestro cuerpo puede lograr cosas milagrosas y puedes determinar tu experiencia de la realidad, eligiendo crear un despertar, en el que te sientas con energía, entusiasmado y agradecido de empezar un nuevo día.

No siendo más, solo me queda agradecer a las personas que se tomaron el tiempo de leer este largo ensayo, independientemente si os ha inspirado o no, esto demuestra parte del aprecio que os tenéis, muchas gracias y date gracias de generar este espacio para ti, para un momento de lectura, para un momento de inspiración, este escrito esta sacado junto con algunas modificaciones propias, del libro Mañanas Milagrosas, sobra decir, que si esto te ha inspirado fue gracias a este libro y el siguiente paso es por supuesto obtener el libro, invierte en ti, esto marcará la diferencia con el resto del mundo.

Si decides obtener el libro y continuar los 6 hábitos y muchas más cosas que el autor recomienda, estaré encantada y con ganas de compartir la experiencia y de saber que pude aportar recomendando este libro un poquito de luz a tu vida.

Es ahora el momento y estoy segura que tienes el potencial y dedicación necesario para hacerlo.